¿En qué consiste una terapia asistida por canes? Las sesiones de terapia asistidas con perros se adaptan a diferentes necesidades. En niños con trastornos del neurodesarrollo, el perro actúa como un motivador para fomentar la comunicación y socialización. Con pequeños que se someterán a una cirugía se elabora una dinámica en la que el niño juega con el rol de doctor y le coloca una mascarilla al perro para sensibilizarse y obtener tranquilidad sobre la situación que experimentará.
En adultos mayores, la presencia de los perros puede evocar recuerdos, disminuir cualquier agitación y generar momentos de conexión con su entorno. A la par, mediante la técnica denominada perro manta, en la que el perro adopta posiciones específicas para actuar como un apoyo a la fisioterapia y estimulación temprana, funciona como una compresa natural de calor para aliviar dolencias físicas.
Por lo tanto, cada día laboral de los canes varía dependiendo la necesidad de cada grupo de trabajo al que se asiste. Un día pueden trabajar objetivos específicos de rehabilitación física, otro de terapia ocupacional o de lenguaje, siempre bajo la supervisión de profesionales de la salud.
El tiempo de cada jornada puede variar de 2 a 5 horas dependiendo el nivel de cansancio de los perros, quienes están cuidados todo el tiempo por los técnicos quienes se encargan de alimentarlos, hidratarlos y revisar que disfruten de su trabajo.
|