Alimentación basada en plantas, la tendencia alimentaria más importante del año
● Durante 2018 estaremos leyendo, oyendo y probando ‘alimentos basados en
plantas’, pues es una tendencia que responde a los valores de consumo
consciente y responsable de las generaciones jóvenes, y que conviene adoptar
debido a sus grandes beneficios.
Así como 2017 fue el año del movimiento ‘orgánico’, no cabe duda en que este será el
año de la ‘alimentación basada en plantas’. Sin tratar de excluir la tendencia de productos
y alimentos orgánicos del año pasado, la ‘alimentación basada en plantas’ busca sumar a
ella, guiándola hacia un estilo de vida mucho más natural y saludable.
Hace algunos años el hashtag #MeatlessMonday (lunes sin carne) fue trending topic
durante un tiempo hasta que, como la mayoría de las tendencias, empezó a perder
relevancia; sin embargo, esta parece haber pasado de las redes sociales a la vida real
pues, hoy en día, alrededor del 31% de la población Estadounidense come al menos una
vez a la semana sin integrar proteínas animales en sus platillos, según el grupo de
investigación de mercado Mintel. Esta es una cifra que tiene mucho sentido, ya que es
una tendencia que empata directamente con los valores a los que las generaciones
jóvenes — millennials y generación Z — se suscriben, creen en ellos y demandan.
La ‘alimentación basada en plantas’ ya forma parte del estilo de vida de una gran
comunidad de consumo consciente y responsable, pues al menos el 35% de la población
Estadounidense obtiene la mayoría de sus proteínas de fuentes distintas a la carne roja
hoy en día. Esto responde a la creencia de que las proteínas alternativas son más
saludables que la carne roja, y que comparten al menos el 66% de sus consumidores.
A través del hashtag #WhatIEatInADay podemos darnos cuenta de que, sin duda, la
‘alimentación basada en plantas’ ya es una tendencia en plataformas como YouTube e
Instagram, pues influencers y usuarios que forman parte de la generación Z y millennial,
publican miles videos y fotografías de sus platillos al día, incluyendo recetas para sumarse
a este movimiento. Sin embargo, el resto de las generaciones también se ha estado
sumando, quizá de manera inconsciente y fuera de las redes sociales, pero a una
velocidad considerable pues, solo en el periodo comprendido entre 2012 y 2016, hubo un
incremento del 257% en la oferta de productos veganos en tiendas de autoservicio de
nuestro país vecino, Estados Unidos.
Mientras que los restaurantes se han ido sumando poco a poco a esta tendencia desde
hace algunos años, ofreciendo cada vez más opciones de ‘alimentos basados en plantas’,
en definitiva este año será en el que exploten su creatividad y podamos ver menús
completos dedicados a este movimiento. De hecho, los productos de ‘alimentación
basada en plantas’ también llevan unos cuantos años en el mercado y es momento de
redescubrirlos, además de comprender su importancia y beneficios a nivel personal. Hoy
podemos encontrar desde hamburguesas hasta barras hechas a base de plantas en el
supermercado; por ejemplo, las barras y cereales Kashi son una excelente opción para
comenzar a integrar alimentos hechos ‘a base de plantas’ a la dieta diaria, pues están
hechos con ingredientes simples y naturales que no contienen organismos modificados
genéticamente (NON GMO), como granos, nueces, leguminosas y semillas que se
combinan para brindar beneficios nutricionales innovadores y funcionales.
Una de las razones principales por las que deberíamos adoptar esta tendencia y hacerla
parte de nuestro estilo de vida, son los beneficios a la salud que la ‘alimentación basada
en plantas’ proporciona, pues los fitoquímicos y fibra que contiene nos ayudan a
protegernos ante ciertas enfermedades crónicas o degenerativas como cáncer,
hipertensión arterial, dislipidemia e hiperglicemia. Además, nos ayuda a mantener un
estado físico saludable, pues promueve la baja de peso sostenible en el tiempo,
reduciendo así el riesgo de obesidad.
Sin duda la ‘alimentación basada en plantas’ será sumamente relevante durante 2018 y
esperemos que se quede el tiempo suficiente para que de verdad podamos adoptarla
como parte de nuestro estilo de vida; pues no sólo estaremos beneficiando a nuestra
salud, sino que también ayudaremos a construir una comunidad de consumo consciente y
responsable para nuestro futuro y el de las próximas generaciones.